El alucinante mundo de Norman

Norman: Norman es un niño de 11 años que se siente desplazado. Es tímido e introvertido, la cuesta mucho hacer amigos (ya no digamos amigas), pero tiene un gran poder: es capaz de hablar con los muertos. Por ello se convierte en todo un héroe cuando el pueblo en el que vive sufre el diabólico ataque de los zombis.

Neil: Este chico gordito y pelirrojo tiene muchos problemas, casi todos causados por su hermano mayor, Mitch. Neil es objeto de todo tipo de bromas y se ha acostumbrado a hacerse la víctima y a exagerar las desgracias. Pero cuando los zombis vengan a buscarle, sacará a relucir una valentía desconocida...

Courtney: Courtney es la hermana mayor de Norman. Tiene 15 años y es la líder del grupo de animadoras del instituto, además de una súper pija insoportable. Y lo que más le avergüenza del mundo es que su hermanito finja que es capaz de hablar con los muertos. ¡Sólo lo hace para llamar la atención!

Mitch: Mitch es el hermano de Neil, y claramente se quedó con los genes buenos de la familia. Es fuerte, luce tatuajes y presume de proteger a su familia, aunque le falta un poquito de cerebro. Él es de los que piensa que a los zombis hay que combatirlos a puñetazos, despreciando la inteligencia.

Alvin, el matón: Alvin es el típico matón del colegio. Le gusta meterse con los niños pequeños, sobre todo si le sirve para presumir de fuerza delante de las chicas. Es bruto por naturaleza. Pero cuando los zombis invadan su querido pueblo... sentirá miedo por primera vez en su vida.

Sandra Babcock: Sandra es la madre de Norman. Está a punto de cumplir los 40 y su misión principal es mantener la paz familiar. Es tan sacrificada que no le importa que su despistado marido la pisotee de vez en cuando. Pero con la invasión de zombis sacará a la bestia que lleva dentro.

Perry Babcock: No es que Perry sea un mal padre para Norman, sólo que a veces le gustaría que su hijo fuera normal y no intentara hablar con los fantasmas. Por lo demás, Perry lucha diariamente contra los kilos que le hacen tener una barriga inmensa, pero por más que lo intenta... ¡nunca es capaz de seguir una dieta!

Aggie: Al igual que Norman, la dulce niña Aggie también tiene poderes paranormales. De hecho, fue acusada de brujería... ¡hace 300 años! Para vengarse, cada aniversario de su muerte levanta a los zombis de sus tumbas y siembra el caos en el pueblo. Pero, en el fondo, es una buena persona. ¡En serio!

El juez Hopkins: Mientras vivió, el juez Hopkins impuso el orden en el pueblo aplicando el concepto de "tolerancia cero". Ahora está en el purgatorio, cumpliendo el castigo por los pecados cometidos. Y su alma resucita con la llamada de Aggie para atormentar a los infieles que se atreven a sonreír a pesar de las desgracias.