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SiguienteTruco o trato: ¡Halloween ha llegado!
¡Pequeños artistas! Una de mis fiestas preferidas del año se acerca y ¡aún no he decidido de qué voy a disfrazarme! ¿Y vosotros? El caso es que me encanta aprender cosas nuevas y, por eso, he estado investigando un poco sobre los orígenes de la fiesta de Halloween. ¿Queréis enteraros también?
El día de Halloween proviene de la cultura irlandesa, aunque después se extendió entre los ingleses, los estadounidenses y el resto del mundo. Sus orígenes se remontan a los celtas y, más concretamente, a una fiesta llamada Samhain que celebraba el fin del verano y del año. Según se decía, este día la conexión con el Otro Mundo era mucho más fuerte, con lo que los espíritus venían a visitarnos a la Tierra. ¿De dónde vino lo de disfrazarse? Al parecer los celtas, con el objetivo de alejar a los malos espíritus, comenzaron a ponerse máscaras y a vestirse de formas estrafalarias para asustarles.
Como puedes imaginar, esta tradición fue extendiéndose después gracias a los romanos, los cristianos y, finalmente, entre los estadounidenses, responsables de expandirla por todo el mundo.
Además de los clásicos disfraces y la ambientación de miedo, ¿sabías que existen muchas otras tradiciones de Halloween? El “trick or treat” ("truco o trato"), por ejemplo, consiste en la visita de los niños a las casas del barrio para conseguir dulces y golosinas y es una de las más populares, pero también es destacable la historia de Jack O’Lantern quien, tras un mal trato con el demonio, fue condenado a vagar por el mundo como un espíritu. Con el objetivo de alumbrar el camino de Jack y del resto de espíritus, comenzaron a utilizarse calabazas con velas para alumbrar su camino, las mismas que ahora usamos para decorar.
Interesante, ¿eh? Yo por el momento voy a ambientarme un poquito probando nuestros juegos de Halloween y pintando unos dibujos sobre la fiesta… ¿Sabéis qué haré después? Voy a preparar unas calabazas para decorar mi casa con Colorín y a escoger qué disfraz voy a usar para asustarle mientras me como unas castañas calientes.
¡Que no os asusten mucho, Pequeños Artistas! Feliz Halloween y... ¡no olvides compartir tu fiesta con el resto de tus amigos!
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